viernes, 1 de marzo de 2019

PREDATOR

PREDATOR
USA (2018)
DIRECTOR: SHANE BLACK
NOTA: 1/4

En un intento por revivir la saga Predatos, sus creadores optaron, tan el poco (injustamente) éxito de la película del 2010, por cambiar completamente el tono, y buscando ponerse al rebujo de Deapool, llevaron este nuevo episodio hacía la comedia enloquecida, irrespetuosa, y gore, mucho gore.

Para ello, contrataron a Shane Black, autor de aquella tomadura de pelo que fue "Iron Man 3", y le pusieron un presupuesto que al final casi llegó a los 90 millones dólares.

Y todo para hacer 160 millones de taquilla (la denostada Predators costó poco más de 30 e hizo 127), que la define como un fracaso comercial, y con criticas muy negativas, en especial de los seguidores de la saga de toda la vida.
Después de verla,  es normal que cualquier amante de las anteriores la terminaran odiando. Yo me incluyo, y aunque me parece que ha sido una oportunidad perdida de revivir la saga a lo grande con ese presupuesto, la verdad es que por otro lado mi lado cinéfilo gamberro se lo ha pasado bien, con las burradas gores, el grupo de locos y las estupideces sin sentido, así que no se si odiarla o amarla.

Como continuación de la saga y las anteriores, esta es un verdadero engaño, llegando al pitorreo en algunas escenas. 
El tono te saca al momento de la película si buscabas algo serio y "formal", sobre todo después de la primera parte, ya que todo se empieza a ir de madre.
Y es una pena porque ese presupuesto (y esta saga, realmente) necesitaba algo más "clásico", pero avanzando en la mitología de los Predators, y así ofrecernos más información. Cosa que, curiosamente, por otro lado, si ocurre en esta película (descubrimos cosas nuevas de ellos), pero claro, todo queda eclipsado por los diálogos, y sobre todo, por un horrible y repelente tercer acto, con un montaje especialmente poco acertado, y que solo sirve para aportar más caos a los que intenten entender algo.

¿Y que nos queda, entonces?
Pues una enloquecida comedia burra, con personajes totalmente pasados de roscas (hasta la Bióloga está algo pillada), Predators despedazando gente, y poco más, que tampoco es poco ojo.
Reconozco que si cambias Predators por cualquier otro bicho alienigena, queda una entretenida serie B con mucha pasta, en la que te ríes por lo atroz de casi todo lo que pasa, siempre que apagues el cerebro claro y entiendas a que has venido y para que se ha rodado esto (personalmente, cuando la bióloga comenzó a correr tan rápido como el Predator, entendí que la cinta no iba a tener respecto ni seguir la lógica de las anteriores).

Lo malo de todo esto, que tendremos que esperar otros 10 años a la próxima de Predator...
PD: Queridos seguidores de la saga, ¿a que ahora la Predators del 2010 no os parece tan mala? Pues esto os pasa por no haberla apoyado en su momento. De aquellos lodos...


"-Te quiero comer el coño..."






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