Hace unos pocos de dias se nos iba Michael Cimino, un director especial, que rebozaba talento, pero por siempre unido al fracaso comercial, como el maestro Welles.
Desde hace mucho, realizador completamente olvidado, al que ya a nadie interesaba, aunque supongo que ahora muchos se subiran al carro de que lo adoraban.
Resulta curioso, deja una filmografía de menos de 10 peliculas, cuando otros directores más mediocres ruedan cada dos años.
Las cosas del cine.
DEP.
No hay comentarios:
Publicar un comentario